Infografía educativa: Estilos educativos

Los estilos educativos, también llamados pautas de crianza, corresponden a un patrón complejo de conductas, actitudes y afectos que los progenitores desarrollan en relación a la educación de sus hijos. Los estilos educativos van a determinar en gran medida el comportamiento de los hijos, por eso es importante conocer los estilos educativos. 

Parámetros de los estilos educativos.

Los parámetros que definen los estilos educativos son:

  • La receptividad hace referencia a las habilidades y actitudes de los progenitores para atender las necesidades emocionales y afectivas de los hijos y para ser receptivos a las mismas.
  • La exigencia hace referencia al nivel de exigencia de los progenitores con los hijos.

Los estilos educativos se van a definir en torno al nivel de receptividad y exigencias que establezcan los padres con los hijos.

Estilos educativos

Estilos educativos

 

  1. Estilo democrático. Los padres son exigentes y receptivos con los hijos. Este estilo supone encontrar el equilibrio entre la exigencia y la receptividad. Las normas y las reglas son establecidas de manera democrática a través del dialogo y el consenso y quedan definidas de manera clara. Basan la educación en el apoyo y son asertivos. Las consecuencias de este estilo educativo son: una sana autoestima, el desarrollo de habilidades sociales y la asertividad, también desarrollo del autocontrol y la responsabilidad.
  2. Estilo autoritario. Progenitores extremadamente exigentes y directivos, pero apenas receptivos. Las normas se cumplen apelando a la obediencia. Las consecuencias de este estilo educativo son: buen rendimiento académico, no se meten en problemas, pero tienen baja autoestima y escasas habilidades sociales, además de una tendencia a la depresión.
  3. Estilo permisivo. Padres más receptivos que exigentes. No exigen un comportamiento maduro o responsable en los hijos. Son poco convencionales y evitan la confrontación. Las consecuencias de este estilo educativo son: tendencia a implicarse en problemas, bajo rendimiento académico, alta autoestima y buenas habilidades sociales.
  4. Estilo indiferente. Padres poco exigentes y poco receptivos. Se trata de una paternidad poco responsable, los padres apenas se implican emocionalmente y tampoco establecen normas o reglas. Las consecuencias de este estilo educativo son: déficit general en la ejecución de todos los dominios, un desarrollo deficiente ya que carecen de vínculos emocionales. Su competencia social es escasa.

 

Celia Rodríguez Ruiz

Psicóloga y Pedagoga

@educa_aprende

 

 

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