La educación ha de tener como finalidad potenciar el desarrollo de la persona. Este fin engloba todos los ámbitos de desarrollo que constituyen a la persona: desarrollo cognitivo (intelectual), físico, afectivo, emocional, personal, etc…
La educación debe proporcionar un desarrollo global e integral del individuo, para que pueda madurar y crecer psicológica y emocionalmente.
La educación por lo tanto no puede quedar reducida exclusivamente a la adquisición de conocimientos (conocer y saber) y habilidades (saber hacer). La educación debe preocuparse de que los niños y niñas aprendan a ser.
Los cuatro pilares de la educación
En 1972, la UNESCO recoge la necesidad de que la educación debe posibilitar el aprender a ser. En 1996 se señalan en el Informe Delors (La educación encierra un tesoro) los cuatro pilares de la educación: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser. Entendidos como cuatro pilares básicos, que se constituyen en un todo global, necesarios para el desarrollo humano.
Aprender a ser
El sentido de la educación actual se está perdiendo en una carrera por alcanzar conocimientos y habilidades. Estos conocimientos y habilidades son necesarios para el desarrollo de los niños y niñas, pero se están sobrevalorando dejando de lado el desarrollo del verdadero ser. La educación debe ser un proceso global de desarrollo donde la adquisición del saber y el saber hacer ha de estar ligado al Aprender a ser.
Aprender a ser, implica el desarrollo pleno, no es suficiente con dotarles de conocimientos y habilidades, se hace necesario el desarrollo de la personalidad madura, las actitudes emocionales (autoconcepto, autoestima, empatía, asertividad, habilidades sociales, etc.) y actitudes para alcanzar la madurez psicológica que les permita enfrentarse a las adversidades, afrontar fracasos y alcanzar sus metas y objetivos.
Aprender a ser les va a permitir conocerse a sí mismos, desarrollar una sana autoestima, fomentar su capacidad de esfuerzo, dotarse de unos valores firmes que contribuyan a su bienestar presente y futuro.
10 consejos para Educar para Aprender a Ser
- Presta atención a su desarrollo personal, a su camino no solo a sus logros.
- Déjales tiempo para pensar, para conocerse y para ser. Tiempo para jugar, para pensar, para desarrollarse. A través del juego maduran.
- Guíales en el proceso de ser. Ayúdales a encontrar su propio yo, y deja que expresen ese yo sin miedos.
- Habla con ellos. Crea un clima de comunicación y confianza, donde puedan expresarse sin temores.
- No les evites conflictos. Los conflictos son una experiencia que nos permite conocernos, que nos permite desarrollarnos y una fuente importante de aprendizaje y desarrollo. Orientales para que aprendan a solucionarlos, pero no se los evites.
- Desarrolla su responsabilidad y autonomía, déjales ser, deja que se ocupen de tareas y que sean autónomos.
- Cuida su sana autoestima. Si les valoras, ellos aprenderán a valorarse, hazles elogios que puedan creerse.
- Permíteles libertad para ser, no les coartes con críticas, juicios o etiquetas. Cada niño/a es diferente y especial, no les exijas ser lo que no son. Pueden impulsarles para que logren sus metas sin temor, pero no exigirles ser como no son.
- Incúlcale unos valores, sirviendo de ejemplo. Los valores se adquieren con la vivencia afectiva de los mismos. No podemos enseñarles valores solo diciéndoselos.
- Procura desarrollarles una personalidad fuerte y madura.