Cuento de lobos para niños: Los lobos no vuelan

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Los lobos no vuelan ▷➤ Cuento de lobos para niños que trata de enseñar el valor de la amistad y el cariño y aprender a no creer en los prejuicios.

A través de la lectura del cuento, los niños y niñas podrán comprender el valor de la amistad. Valorar los ratos en compañía de amigos y comprender la importancia del afecto y el cariño. Se darán cuenta de que no se pueden hacer prejuicios que nos llevan a actuar sin pensar y sin razones y comprenderán como con ayuda de los seres queridos podemos cumplir nuestros sueños, aunque nos digan que no podemos. En este cuento de lobos para niños trabajaremos las emociones y su papel en la orientación de nuestra conducta, como el lobo al sentirse mal cambia su actitud y su comportamiento.


Cuento de lobos para niños: Los lobos no vuelan

Hace algún tiempo un pequeño lobito travieso quería aprender a volar. Pero es sabido por todos que los lobos no vuelan. Los demás lobos le decían:

-Tienes que asustar a la gente, no puedes volar, lo que hacen los lobos es asustar.

-Pero a mí no me gusta asustar a la gente, yo quiero volar.-respondía el lobo.

Y los demás lobos se reían de él.

El pequeño lobito que quería aprender a volar, no se desanimaba. No entendía por qué tenía que asustar a la gente, si lo que quería era volar y ayudar a los demás como hacían otras criaturas.

-La gente odia a los lobos. Le dijeron los demás lobos- si les ayudas te trataran mal, por eso tienes que asustarles, porque así te tendrán miedo y no se meterán contigo.

El pequeño lobo, no quería creerse estas palabras, pero a decir verdad le asustaba que la gente pudiera tratarle mal.

Una tarde mientras paseaba pensando en lo maravilloso que sería poder volar, a lo lejos observo a un grupo de niños y niñas jugando con sus cometas. Las cometas volaban y él quería volar como las cometas. Los niños y niñas estaban rodeados de pequeños seres con alas que revoloteaban a su alrededor, eran hadas y él quería volar como lo hacían las hadas. Poco a poco se acercó, despacito con algo de miedo.

Los niños y niñas no se habían dado cuenta de su presencia y las hadas tampoco. Así que pudo acercarse mucho. Cuando de repente uno de los niños le vio y comenzó a gritar:

-¡Un lobo! ¡Un lobo!

Todos los niños y niñas le miraron, con temor e incluso con odio y comenzaron a gritar, algunos le tiraron piedras y las hadas se fueron volando. El pequeño lobito travieso se puso muy triste y se alejó de allí llorando. Los demás lobos tienen razón, pensó entonces. Tengo que asustar a la gente. Desde entonces el pequeño lobito dejo de soñar con volar y se dedicó a buscar personas a las que asustar.

Paso algún tiempo y este pequeño lobo se convirtió en uno de los lobos más temidos. Un domingo soleado mientras paseaba observo a lo lejos a un grupo de hadas que revoloteaban. “Qué se creerán esas hadas pensó, solo porque pueden volar”. Con mucho sigilo  se acercó a ellas y con un tenebroso aullido las asusto, se fueron volando y el lobo reía a carcajadas.

Riendo estaba, cuando escucho una voz que le decía con enfado:

-¡¡Pero bueno!!, que te hemos hecho para que nos asustes.

El lobo miro como un hada pizpireta revoloteaba a su alrededor y le reñía por haberlas asustado. Le pareció hasta graciosa. Y continúo su camino sin responderla.

-Oye escúchame y respóndeme-le increpo el hada- eso es de ser muy maleducado.

El lobo se volvió con enfado y sin saber porque le contó al hada pizpireta lo que le había ocurrido tiempo atrás cuando quería aprender a volar. Al contarlo y recordarlo se puso muy triste y enfadado mando callar al hada y se fue de allí.

Desde aquel día algún tipo de unión se había producido entre el temido lobo y el hada pizpireta. Y cada domingo sin haberlo planeado acudían ambos al lugar donde se encontraron por primera vez. Al principio apenas se dirigían la palabra, pero poco a poco ambos se fueron acostumbrando a la presencia del otro. Un día comenzaron a hablar y sin haberlo planeado se hicieron muy amigos.

Pasaban cada domingo, dedicándose largas charlas, reían juntos y jugaban mucho. Ambos se tomaron mucho cariño. Uno de esos domingos el hada le dijo al lobo:

-Si quieres yo te puedo ayudar a volar. Pero tienes que dejar de asustar a la gente.

El lobo no estaba seguro de querer dejar de asustar a la gente. Su amiga el hada era buena, pero los demás no lo eran. Finalmente su sueño de volar fue más fuerte y decidió dejar de asustar a la gente.

El hada le llevo al pueblo con la gente, había avisado a todos de que su amigo era un lobito bueno y nadie se metió con él. En la plaza del pueblo había un gran globo de colores. El lobito se puso muy contento y subido en el globo pudo volar.

FIN

Cuento de lobos para niños: Los lobos no vuelan

Actividades para trabajar la comprensión lectora: Los lobos no vuelan

A continuación os dejamos algunas preguntas para trabajar la comprensión lectora con el cuento, que podréis realizar en el aula o en casa. Os dejamos también una ficha para que la podáis descargar de forma gratuita.

  1. ¿Cuál era el sueño del lobo?
  2. ¿Por qué abandono su sueño?
  3. ¿Cómo se sintió el lobo cuando le miraron con miedo y con odio?
  4. ¿Qué hacían el hada y el lobo juntos?
  5. ¿Por qué crees que se tomaron tanto cariño?
  6. ¿Qué tenía que hacer el lobo para que el hada le ayudara?
  7. ¿Por qué crees que tenía que hacer eso?
  8. Piensa en algún amigo/a tuyo
    1. ¿Qué cosas hacéis juntos?
    2. ¿Te ha ayudado a superarte?
    3. ¿Por qué sois amigos?
Ficha cuento de lobos para niños
Ficha comprensión lectora : Los lobos no vuelan

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© 2021 ▷ Educa y Aprende ➡➤ [ Cuento de lobos para niños: Los lobos no vuelan ] Cuentos cortos para niños por Celia Rodríguez Ruiz | Psicóloga y Pedagoga @educa_aprende

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