¿Realmente es tan importante aprender inglés desde pequeño? Te lo contamos

Sí lo es, y más de lo que parece. Diversos estudios demuestran que aprender idiomas es un ejercicio de lo más saludable para la mente, ya que al hablar una segunda lengua se mejoran la inteligencia y las condiciones cognitivas, de memoria y de percepción.

Cuando un niño nace cuenta con cien millones de neuronas independientes, sin conexión de ningún tipo. Es por ello que se habla de la estimulación temprana, ya que es fundamental que el pequeño se someta a experiencias que le den la posibilidad de hacer conexiones cerebrales. Repetir estas experiencias lleva a que esas conexiones se estabilicen, y pasen a formar parte del conocimiento de la persona, dando estructura a su cerebro.

Así las cosas, la enseñanza de una segunda lengua en edades tempranas es una experiencia y estimulación que el menor adquiere como ayuda en su desarrollo a nivel cognitivo. Por ello, y afortunadamente, existen excelentes academias de inglés para niños en Madrid y no solo en la capital, sino por toda España.


Cuanto antes, mejor

También hay estudios que señala, que si los niños no son expuestos a la experiencia bilingüe antes de los ocho años, después no tendrán una mente bilingüe. Podrán aprender una lengua, pero sin llegar a ese nivel. De hecho, el período crítico de aprendizaje es hasta el año y medio de edad.

No hay que olvidar que el cerebro es un músculo, por lo que aprender una segunda lengua le sirve de entrenamiento, al memorizar vocabulario nuevo y tratar de comprender la estructura de ese otro lenguaje. Por otro lado, cabe destacar que un estudio demostró que bebés con entre cuatro y seis meses de edad eran capaces de distinguir entre lenguas diferentes.

Ya desde el nacimiento, e incluso antes de hablar o entender una lengua, los niños comienzan a procesar las palabras que escuchan en su entorno. Al hablar de palabras a su alrededor hacemos referencia a las lenguas a las que están expuestos los pequeños, con el objetivo de determinar los sonidos de la lengua (fonemas) y la forma de las frases (sintaxis).


Con tan solo un año, el niño puede empezar a crear palabras en dos idiomas

Sobre los doce meses aproximadamente, la mayor parte de los niños están preparados ya para empezar a crear sus primeras palabras. Y si estamos hablando de pequeños expuestos a dos idiomas, lo harán en ambas lenguas.

Cuando el niño empieza a producir sus primeras palabras y comienza a combinarlas en frases, empezamos a ver cómo desarrollan la habilidad de relacionar los sonidos de la lengua con sus significados. A la edad de tres años, la mayor parte de los pequeños tienen la capacidad de controlar parte importante de la lengua que tienen a su alrededor.

Un estudio encargado por la Unión Europea en 2004, afirma que el comienzo temprano del aprendizaje de las lenguas puede ofrecer ventajas importantes a los alumnos, al activar los mecanismos naturales de los que estos disponen para adquirir lenguas, a la vez que aumenta el período de aprendizaje en el que se les ofrece una experiencia tanto lingüística como intercultural.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *