El apego es un vínculo o afecto primario, que necesitamos para nuestra evolución y supervivencia. Además, tiene consecuencias directas sobre la manera en la que nos relacionamos con otras personas y aporta mucha información de cómo somos y sobre la imagen tenemos de nosotros mismos.
El tipo de apego que se ha desarrollado en la infancia entre los padres y sus hijos, incide directamente en la personalidad, en el modo de actuar, de relacionarse y en el modo de gestionar y expresar las emociones.
El apego afectivo o emocional durante la infancia es necesario, ya que permite crear nuestros vínculos; sin embargo, tener dependencia emocional genera sufrimiento a la persona que la padece y desestabiliza las relaciones con las personas de nuestro entorno.
De esta manera, el apego ansioso en los niños genera una gran dependencia emocional y causa que necesiten grandes dosis de seguridad en sus vínculos, ya que su amor propio y autoestima están afectadas.
¿Qué es el apego ansioso ambivalente en los niños?
Los niños que desarrollan relaciones de apego seguras y estables con sus padres, serán adultos más independientes, seguros de sí mismos y tendrán una mayor facilidad para adquirir compromisos.
No obstante, si el apego durante la infancia no es seguro pueden convertirse en niños con apego ansioso, que arrastren consecuencias emocionales que en algunos casos pueden afectar su salud mental.
Uno de los tipos de apego emocional es el apego ansioso ambivalente en los niños y se manifiesta cuando al parecer son muy independientes a la madre o a su figura de referencia y la ignoran; pero de repente, al no tenerla cerca o no encontrarla se ponen excesivamente nerviosos.
El psicólogo inglés John Bowlby creador de la teoría del apego, señaló que uno de los cuatro tipos de apego que existen es el apego ansioso ambivalente. Este notable psicólogo indicó, que entre las características del apego ansioso ambivalente se encuentra la inseguridad y el miedo al abandono.
¿Cuáles son las características de los niños con apego ansioso?
Los niños que manifiestan un patrón de apego ansioso, suelen aferrarse a sus figuras de apego y generalmente, suelen actuar desesperados por lograr su atención.
Entre las principales características de los niños con apego ansioso, es que se incomodan ante la presencia de extraños, lloran ante la ausencia de sus progenitores y cuando regresan, no siempre se calman y hasta los rechazan. Al parecer, el origen de esta ambivalencia se debe al tipo de cuidado durante la infancia temprana.
En este tipo de apego, la expresión de emociones o sentimientos fluctúa entre polos opuestos, como: El amor y el odio, la estabilidad y la inestabilidad, la seguridad y la inseguridad.
¿Por qué ocurre el apego ansioso ambivalente?
Generalmente, el apego ansioso ambivalente ocurre debido a una interacción intermitente entre los padres o el cuidador, y el niño en su infancia temprana.
Suele suceder, que en estos casos la respuesta del cuidador del bebé es inconsistente, tardía o no siempre está disponible. Por ejemplo, cuando el cuidador no atiende el llanto del bebé o reacciona con miedo o rabia.
Es un hecho, que los niños perciben la conducta de sus cuidadores como imprevisible y esto les lleva a buscar su aprobación en una medida desproporcionada y llegan a temer que los abandonen. De esta manera, los niños exploran la realidad de una forma para nada relajada y siempre intentan estar cerca de su figura de apego.
Como respuesta a estos comportamientos, los niños muestran conductas contradictorias como aferrarse a su cuidador y llorar al apartarse de él, lo que en ningún caso hace que los padres puedan calmar su malestar.
Consecuencias del apego ansioso en los niños y adultos
Entre las consecuencias que ocasiona el apego ansioso en los niños, es que cuando son adultos suelen tener relaciones muy dependientes y necesitan que continuamente les confirmen que se les quiere.
Igualmente, se convierten en personas inseguras e inestables que no soportan la soledad y al establecer una relación, tienen un miedo incontrolable de ser rechazados y abandonados.
Otra consecuencia del apego ansioso es que pueden ser extremadamente celosos, mostrando una gran inestabilidad emocional.
Todo indica que los estilos de apego durante la infancia influyen en la edad adulta; sin embargo, las investigaciones indican que cuando se establecen relaciones estables y seguras en edades más tardías, se pueden reparar estos vínculos que han sido maltratados durante la infancia.
Señales de las personas con dependencia emocional
Es posible que las personas con un apego emocional más ansioso tengan una dependencia emocional importante, y suelen dar las siguientes señales:
- Sufren de ansiedad constante.
- Su felicidad depende del vínculo con otros.
- Su amor propio y su autoestima pasan a un segundo lugar.
- Idealizan a otras personas y ponen por delante sus necesidades en vez de las propias.
- No se creen merecedoras de afecto y que ellos mismos son responsables de la carencia de amor hacia ellos.
Un campo muy interesante para profundizar en relación a las dificultades de muchos niños y jóvenes que manifiestan diferentes tipos de dificultad para tener autoestima apropiadas para la edad, algo que puedo evidenciar en niños y jóvenes de post primaria en una institución educativa en la que trabajo y en dónde se evidencian muchos chicos con dificultades emocionales.